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Despegar daría marcha atrás con la compra de Best Day

La propia compañía, acuciada por una caída del 95% de las reservas, puso en duda que se complete la adquisición de Best Day, por la cual en enero había anunciado que pagaría US$ 136 millones.

El anuncio por parte de Despegar de que la compra de Best Day puede “demorarse, modificarse o cancelarse” es un botón de muestra de cómo en apenas tres meses el ecosistema turístico pasó de pensar en la expansión a luchar por la supervivencia.

En un marco de severos recortes de costos (léase 500 despidos, ajustes salariales y “renegociación” de los pagos a proveedores) fue la propia OTA la que anunció un virtual retiro de la oferta -récord para la región- de US$ 136 millones por el 100% de Best Day: “Despegar no puede asegurar que se consumará la adquisición en los términos existentes, en términos diferentes o en absoluto”.

Desde la compañía informaron que esto es posible porque el cierre del acuerdo de compra celebrado en enero estaba sujeto a una serie de condiciones, incluidas las aprobaciones regulatorias y ciertas circunstancias comerciales. Esto les permitiría demorar, modificar o cancelar el proceso.

En el caso de la compra de Viajes Falabella y sus 85 sucursales en la región –operación ya oficializada un 100% por unos “módicos” US$ 27 millones-, Despegar buscó ahuyentar algunos rumores indicado que “aceleraremos las sinergias de la adquisición”.

DE PRINCIPE A MENDIGO.

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Otros tiempos. En 2017 cuando Despegar empezaba a cotizar en la Bolsa de Nueva York.
Otros tiempos. En 2017 cuando Despegar empezaba a cotizar en la Bolsa de Nueva York.

En el marco de la carrera de adquisiciones que libra contra CVC en Latinoamérica, hace poco más de tres meses Despegar conmovía al mercado con la millonaria operación de US$ 136 millones por el 100% de Best Day, un grupo líder en México y con presencia en Argentina, Brasil, Estados Unidos y Canadá. Con la particularidad de que, además de los US$ 140 millones de facturación anuales (el 70% de ventas online), se quedaba con 190 puestos de venta, la prestación de terrestres y tours en los principales destinos mexicanos y el negocio B2B de Best Day.

En enero todavía soplaban vientos de dinero fácil y endeudamiento a bajo costo, donde la consigna era hacer volumen. Pero el Covid-19 sopló ese castillo de naipes que sostiene a varias OTAs.

En el caso de Despegar las reservas brutas cayeron un 95% y pasó de anunciar la más millonaria compra de agencias de viajes de la región a implementar un drástico plan de recortes del 40% de sus costos estructurales.

Además de los despidos, Despegar anunció para el segundo trimestre una reducción del 50% de los salarios de directivos y la alta gerencia y un 25% para los ejecutivos medios. Se inscribió en los planes de salvataje de los Gobiernos para el pago de salarios, congeló las contrataciones, redujo las horas de trabajo e implemento “licencias no remuneradas” en ciertos países. Pero también los proveedores deberán ser solidarios a la fuerza, ya que la OTA confirmó que renegociará los términos y condiciones de pago “para poder llegar a los mejores acuerdos posibles que permitan transitar este delicado contexto”.

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